pausas activas dinamicas No hay más de un misterio
2. Nos ponemos de pie, juntamos los brazos por arriba de la cabecera como si quisiéramos tocar el techo, luego juntamos las palmas y nos inclinamos alrededor de un lado formando una media escaparate o una banana, nos estiramos mucho mucho durante 10 segundos y repetimos al lado contrario.